¿SI SE CIERRA UNA PUERTA, SE ABRE UNA VENTANA?

Definitivamente los cubanos tenemos que ser creativos y cumplir con el refrán que dice que "la necesidad hace parir hijo macho", que llevado al lenguaje de la mistica  española Santa Teresa de Jesús (de Avila) equivaldría a "hacer de la necesidad virtud", porque la realidad geográfica en que vivimos (no los del lado de acá del charco, sino de los que viven en la Isla) y la virgiliana "circunstancia del agua por todas partes", nos hace ser tan creativos no ya sólo en lanzarnos en cualquier cosa que flote, a lo que eufemísticamente llamamos balsa, sino en inventarnos cualquier vía y posibilidad de huir del infierno en que, desde 1959, se ha vuelto "la tierra más hermosa que ojos humanos han visto", según el decir de Cristóbal Colón (ya difunto, evidentemente, pues sino diría otra cosa)

El asunto es que, aún cuando nadie está a favor de las vías ilegales, por aquello de que la verdadera y sana moral no aprueba lo de "el fin justifica los medios", cada vez que un invento cubano (para escapar del infierno y su tiranosaurio desgobernante) es patentado en alguna parte del mundo, se aparece un atravesado y socotroco inteligente que nos pasma el palo.

Pues sí, las últimas noticias de las semanas recientes dan cuenta de la eliminación y captura de un grupo de sesudos cubanos y sus compinches europeos, que sostenían una red de tráfico de personas desde Cuba con destino a Europa, como vía de escape de un castrocomunismo trasnochado y obsoleto, en el que todo el mundo busca una vía para el "sálvese quien pueda".

Al menos, con este hecho, los europeos se libran de una emigración mucho mejor que la poligámica y terrorista presencia musulmana que esta convirtiendo al Viejo Continente en una auténtica Eurabia (ya denunciada por mi bien amada y ya difunta Oriana Fallacci), pues los cubanos son echaos palante, trabajadores y esforzados, y donde se establecen mejoran y prosperan económica y materialmente. Y los norteamericanos se libran de otra vía de entrada a su territorio, pues ya los cubanos llegan, lo mismo desde Australia, de Chile, Israel o México. Sólo que la lucha contra el terrorismo ha afilado los controles en Europa que permiten que sea descubierta esta red de inmigración cubana.

La red desarticulada se extendía por España, Alemania, Italia, Suiza y Austria, y la misma obtenía "Cartas de Invitación" falsas para obtener los visados y documentación necesaria para introducirlos en esos países. Por esta acción policial fueron detenidos 46 personas, de ellas 26 en España, 16 de Alemania y 4 en Austria. En España los contactos establecidos se detectaron en las ciudades de Valencia (14), Castellón (3), Alicante (3), Tenerife (3) y una en Barcelona, Algeciras y Madrid. El responsable de esta red internacional era un español de origen cubano nombrado Pedro domiciliado en Valencia y contaba con mas de 20 contactos a través de los cuales controlaba todos los pasos desde la salida de Cuba hasta la llegada a esos países.

El precio de los documentos y el traslado desde Cuba hasta el viejo continente oscilaba entre 4000 y 12000 dólares, que los familiares de muchos de ellos pagaban gustosamente con el objeto de reunir a sus familias y darles una nueva oportunidad de vida en libertad y progreso. Tristemente al ser descubierta esta red (que reconocemos era ilegal, pero qué otra alternativa tienen los cubanos) cierra una puerta más de escape a los cubanos que sufren el régimen castrista desde hace ya casi cincuenta años, lo que se une al bloqueo maritimo que los guardacostas americanos tienen establecido alrededor de la Isla, luego que el demócrata Clinton revisara la Ley de Ajuste Cubano con la doctrina "pies secos, pies mojados", que cerró la posibilidad a miles de personas, que ahora buscan nuevas vías de escape, que los alejan cada vez más de la "tierra prometida" y el "sueño americano", al tener que intentarlo hacia Honduras, las Islas del Caribe, Santo Domingo, Puerto Rico o Europa, sino más lejos como Argentina y Chile, o Australia.

Esperamos que finalmente una bocanada de aire fresco se nos abra como una ventana hacia la libertad, con la pronta desaparición del régimen castrista y una transición política que conduzca a nuestra amada isla hacia la soñada libertad, que no empuje a ningún cubano a huir de su terruño natal sino a construir una sociedad más justa y mejor.