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Cubaneo Cotidiano

TECNOLOGIA DE PUNTA

TECNOLOGIA DE PUNTA

Eso parece haber descubierto la presidenta argentina Cristina Kirchner al visitar Cuba con sólo visitar los centros de investigación de Biotecnologías, percibiendo a vuelo de pájaro, de un vistazo, según sus propias palabras, “el desarrollo tecnológico y científico alcanzado por Cuba a pesar del embargo de Estados Unidos de casi medio siglo”, sin percatarse, siquiera, de la miseria en la que vive el pueblo cubano, para lo cual no hay que ser muy avezado.

¿De qué le vale, -digo yo-, tener un gran desarrollo tecnológico, -que tampoco es lo máximo ni lo mejor-, cuando los hospitales están sucios, las farmacias vacías sin medicinas, las bodegas o tiendas de productos alimenticios sin nada que ofrecer, y un pueblo hambreado y prácticamente en la mendicidad, si todo eso no le reporta bienestar y prosperidad?

No acaban de entender muchos politicastros de izquierda, que desde que la URSS impuso su sistema ideológico, luego de la derrota fascista, en las naciones del este europeo, hasta nuestros días, que los gobiernos totalitarios, socialistas o mal llamados comunistas, usan la cultura, el deporte, la educación, la salud y la investigación científica como cartas de triunfo y propaganda del sistema para atraer “tontos útiles” que le hagan la debida propaganda, como ahora hace la depresiva dirigente gaucha.

Por eso, los deportistas, los artistas, los científicos y los médicos que ganan competencias, que obtienen premios internacionales o prestan servicio en otros países le sirven de publicidad al sistema que no reconoce los talentos sino que cree que le pertenecen, y los explotan, y los usan, y los desechan cuando ya no le son útiles.

Que en Cuba hay gente increíble, con dotes y talentos extraordinarios, nadie lo duda, pero que ello sea un mérito de la Revolución, a pesar del “embargo” en que los Castro lo han sumido en la pobreza y la miseria, no es digno de alabar. Pero lo curioso es que la Cristina que antes de tomar el poder se proclamara defensora de los derechos humanos de los argentinos víctimas de la represión dictatorial, no haya dicho una palabra o al menos se hubiera reunido con los disidentes, habla mucho de la pobreza de valores y del oportunismo de la que alcanzó el poder en un país, donde si no hay más desarrollo científico, no será por la falta de libertades personales de sus habitantes.   

Por la misma razón, la Señora Presidenta, se ha dejado manipular, presentando una foto falsa, en la que aparece abrazada a un Moribundo-en-Jefe, que parece haber resucitado en un nuevo cuerpo por obra y gracia de la tecnología castrocomunista, cuando todos saben que si no está muerto ya, embalsamado y congelado, es poco lo que le falta, pues tiene un pie en el aire y el otro en la tumba. !No seas boluda, Che!      

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